miércoles, 18 de junio de 2014

2º DE BACHILLERATO: PRUEBA DE LENGUA CASTELLANA Y LITERATURA. PAU, MADRID, JUNIO 2014

Estudiantes madrileños, durante las pasadas pruebas de Selectividad. | Begoña Rivas

OPCIÓN A

En España, donde la pereza más que un vicio es una religión, se comprenden difícilmente esas monumentales obras de los químicos, naturalistas, y médicos alemanes en las cuales solo el tiempo necesario para la ejecución de los dibujos y la consulta bibliográfica parecen deber contarse por lustros. Y, sin embargo, estos libros se han redactado en uno o dos años, pacíficamente, sin febriles apresuramientos. El secreto está en el método de trabajo, en aprovechar para la labor todo el tiempo hábil, en no entregarse al diario descanso, sin haber consagrado dos o tres horas a la tarea, en poner dique prudente a esa dispersión intelectual y a ese derroche de tiempo exigido por el trato social, en restañar, en fin, en lo posible, la cháchara ingeniosa del café o de la tertulia, despilfarradora de fuerzas nerviosas (cuando no causa disgustos), y que nos aleja con pueriles vanidades y fútiles preocupaciones, de la tarea principal.
Si nuestras preocupaciones no nos permiten consagrar al tema más que dos horas no abandonaremos el trabajo a pretexto de que necesitaríamos cuatro o seis. Como dice juiciosamente Payot, “poco basta cada día si cada día logramos ese poco”.
Lo malo de ciertas distracciones, demasiado dominante, no consiste tanto en el tiempo que nos roban, cuanto en la flojera de la creación del espíritu y en la pérdida de esa especie de tonalidad que nuestras células nerviosas adquieren cuando las hemos adaptado a determinado asunto.
No pretendemos proscribir en absoluto las distracciones, pero las del investigador serán siempre ligeras y tales que no estorben en nada las nuevas asociaciones ideales. El paseo al aire libre, la contemplación de las obras artísticas o de las fotografías de escenas, de países y de monumentos, el encanto de la música y sobre todo de la compañía de una persona que, penetrada de nuestra situación, evite cuidadosamente toda conversación  grave y reflexiva, constituyen los mejores esparcimientos del hombre de laboratorio. Bajo este aspecto será bueno también seguir la regla de Buffon cuyo abandono en la conversación (que chocaba muchos admiradores de la nobleza y elevación de su estilo como escritor) lo justificaba diciendo: "estos son mis momentos de descanso".

 Santiago Ramón y Cajal 'Reglas y consejos sobre la investigación científica. 1987.

Cuestión 1: Haga un comentario de texto del fragmento que se propone contestando a las preguntas siguientes.

a) Enuncie el tema del texto (0,5 puntos).

b) Detalle sus características lingüísticas y estilísticas más sobresalientes (1,25 puntos).

c) Indique que tipo de texto es (0,25 puntos).

Cuestión 2: Redacte un resumen del contenido deltexto (1 punto).

Cuestión 3: Elabore un texto argumentativo a favor o en contra de que en ciertas profesiones se sustituye un horario fijo de trabajo por otro flexible a cambio de una determinada productividad (1,5 puntos).

Cuestión 4A: Analice sintácticamente: No pretendemos procribir las 
distracciones, pero las del investigador serán siempre ligeras. (1,5 puntos).

Cuestión 4B: Explique el concepto de metáfora y el sentido metafórico de la siguiente expresión del texto: Poner dique prudente a esa dispersión intelectual (1 punto).

Cuestión 5A: La novela realista y naturalista del siglo XIX (2 puntos).

Cuestión 5B: Comente los aspectos más relevantes de la obra del siglo XX anterior a 1939 que haya leído en relación con su contexto histórico y literario (1 punto).





Opción B

La timidez es un rasgo de carácter. Se define por una marcada tendencia a rehuir los contactos sociales con desconocidos, evitar la iniciativa en el terreno social, permanecer silenciosos en las reuniones, sentir dificultad para mirar a los ojos, y un gran pudor en hablar de las propias emociones. El tímido no suele serlo dentro de casa o en ambientes familiares, y una vez pasada la dificultad de los primeros contactos su adaptación social puede ser buena. La timidez hace sufrir a mucha gente, pero no es un trastorno grave, ni una enfermedad como lo es la fobia social. El tímido suele adaptarse bien a partir de un periodo de inhibición inicial. ¿Qué es lo que teme una persona tímida? Las estadísticas nos proporcionan el siguiente ranking: los desconocidos (el 70%), las personas del sexo opuesto (64%), hablar delante de un público (63%), estar en un grupo grande (68%), ser de un estatutos que se supone inferior al de sus interlocutores o sentirse inferior a ellos de una forma u otra (56%).
Hay que ser cuidadoso al juzgar una posible timidez, porque en un mundo soez, ruidoso, agresivo y desvergonzado como el nuestro podemos acabar llamando timidez a la buena educación y el respeto por lo demás. La evolución del concepto de pudor nos demuestra que estamos tratando un tema sometido a grandes influencias sociales y culturales. Una parte importante de las características atribuidas a las personas tímidas -dulzura, pudor, recato, pasividad- han sido durante siglos atributos de la perfección femenina. Tradicionalmente se ha elogiado a la mujer tímida, lo que hace que en este momento la timidez sea sentida y resentida sobre todo por los hombres, que son los que con mayor frecuencia acuden a los especialistas en busca de ayuda, porque contraviene gravemente la imagen social de la masculinidad.
Estamos hablando de un tipo de ansiedad social que dificulta la vida de muchas personas y condena a la soledad y a vivir en retirada. Solo cuando alcanza unos grados de angustia insoportables e invalidantes entramos en el terreno patológico y hablamos de "fobia social". 

(José Antonio Marina, 'Anatomía del miedo. Un tratado sobre valentía', 2006).



Cuestión 1: Haga un comentario de texto del fragmento que se propone contestando a las preguntas siguientes:

a) Enuncie el tema del texto (0,5 puntos).

b) Detalle sus características lingüísticas y estilísticas más sobresalientes (1,25 punto).

c) Indique qué tipo de texto es (1 punto).

Cuestión 2: Redacte un resumen del contenido del texto (1 punto).

Cuestión 3: Elabore un texto argumentativo a favor o en contra de que un chico tímido tenga un problema mayor que una chica tímida (1,5 puntos).

Cuestión 4A: Analice sintácticamente: ' Hablamos de un tipo de ansiedad social que dificulta la vida de muchas personas y las condena a la soledad' (1,5 puntos).

Cuestión 4B: Indique a qué categoría gramatical o clase de palabras pertenece desvergonzado, analice su estructura morfológica y señale a qué proceso de formación de palabras responde (1 punto).

Cuestión 5A: La poesía de la Generación del 27 (dos puntos).

Cuestión 5B. Comente los aspectos más relevantes de la obra posterior a 1939 que haya leído en relación con su contexto histórico y literario (1 punto).



martes, 4 de junio de 2013

2º DE BACHILLERATO: PRUEBA DE LENGUA CASTELLANA Y LITERATURA. PAU, MADRID, JUNIO 2013


TEXTO OPCIÓN A:


"En el año 1709, en el palacio romano del cardenal Ottoboni, tuvo lugar un singular torneo musical entre Georg Friedrich Haendel y Domenico Scarlatti. Ambos tenían la misma edad, veinticuatro años, pero ya eran maestros en su arte. Y solo contaban para su cotejo con dos armas incruentas: un clave y un órgano. El sajón era cosmopolita; el latino, exuberante y mediterráneo. Aunque se mantuvieron magníficamente parejos durante largo tiempo, parece que finalmente el órgano inclinó la balanza a favor de Haendel. Luego cada cual siguió su camino, pero esta rivalidad nunca enturbió la recíproca admiración que los dos artistas se profesaron. Casi medio siglo después, ya al final de su vida, el viejo Scarlatti siempre se santiguaba al oír mencionar el nombre de Haendel en señal de respeto.

Me conmueve mucho esta anécdota dieciochesca (cuya noticia debo a Stefano Russomanno, en el número 109 de la revista discográfica Diveri). Primero, porque en estos tiempos en que se llama "competitividad" al intento feroz de eliminar al adversario, o sea, de suprimir la competencia, nos recuerda que la verdadera emulación engrandece al rival y quiere mantenerlo como refrendo de la excelencia. Y en segundo (pero principal) lugar, porque se refiere a la más hermosa disposición que suscita el arte, la capacidad de admirar. Quien no la conoce, aunque parezca ser un gran artista, carece de un registro esencial de la sensibilidad que produce el arte y a la que el arte interpela. Desconfío hondamente de la aparente superioridad de los perpetuos desdeñosos, de la insobornable "objetividad" de los cicateros profesionales y de los desmitificadores del mérito ajeno que siempre se las arreglan para barrer la fama hacia casa. Creo que admiramos con lo de admirable que hay en nosotros y nunca he tropezado con nadie, verdaderamente admirable que no supiese también ser sinceramente admirador". 


                                                              (Fernando Savater, Mira por dónde, 2003).

PREGUNTAS


1.- Haga un comentario de texto del fragmento que se propone contestando a las preguntas y siguientes:

a.- Enuncie el tema del texto (0.5 puntos).
b.- detalle sus características lingüísticas y estilísticas más sobresalientes (1,25 puntos)
c.- indique qué tipo de texto es (0.25 puntos).

2.- Redacte un resumen del contenido (1 punto).

3.- Elabore un texto argumentativo a favor o en contra de que tener un carácter competitivo sea una virtud (1,5 puntos).


4a.- Analice sintácticamente:

Desconfío hondamente de la aparente superioridad de los perpetuos desdeñosos que siempre barren la fama hacia casa (1,5 puntos).

4b.- Indique a qué categoría gramatical o clase de palabras pertenece engrandece, analice su estructura morfológica y señale a qué proceso de formación de palabras corresponde (1 punto).


5a.- La literatura del siglo XVIII. Ensayo y teatro (2 puntos).


5b.- Comente los aspectos más relevantes de la obra del siglo XX anterior a 1939 que haya leído en relación con su contexto histórico y literario. (1 punto).

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TEXTO OPCIÓN B


"Comencé a vincularme con la lectura en casa de una maestra, doña María. Vivíamos en Cruz del Eje, al noroeste de la provincia de córdoba. En esa época recién se ingresaba a la escuela primaria con seis años de edad. No había jardín de infantes. Doña María enseñaba en su galería cubierta por un techo de cinc. Éramos varios estudiantes de diversas edades, y la mayoría recibía lecciones para superar sus dificultades en la escuela. Las primeras hojas de mi cuaderno mostraban una avergonzada torpeza. Las volvía a mirar para cerciorarme de mis progresos. Hasta que esa mujer de cabellos blancos me enseñó que cada sonido podía ser dibujado y luego identificado mediante un dibujo específico. Por eso a la "m" le decía "mmm", no "eme". Tanto me impresionó el descubrimiento que lo mostré a mis padres. Ellos sonrieron y pusieron delante de mí libros y periódicos que apoyaban esa revelación.


Pero después me negaba a leer. Una impaciencia exagerada me hacía abandonar el esfuerzo. Mi madre era un apersona a quien no la asustaba ningún esfuerzo, y menos si debía aplicarse para la conquista de la cultura. Una tarde dijo que me llevaría a la biblioteca pública. ¿La qué? No entendí y fui arrastrado de la mano, por no decir de las orejas.


Éramos muy pobres, pero cuando ingresé a la biblioteca junto a mi madre, me pareció haber cambiado de mudo. Paredes tapizadas con enjoyados lomos de libros sobre los cuales se cerraban grandes ventanas de cristal. Pisos de mosaicos brillantes. Mesas de dos aguas para los diarios. Una enorme mesa horizontal cargada de revistas. Y el escritorio de la señorita Britos. Mamá me presentó, ella sonrió con ternura y me invitó a tomar asiento, mientras me entregaba revistas con ilustraciones infantiles. Su técnica fue simple. ME entusiasmó con las historietas y luego con breves aventuras, cada vez menos cortas, hasta que recalé en autores que no podía abandonar. Entre los 16 y 14 años devoré casi todas las maravillas de ese santuario. Le debo más de lo que me atrevo a confesar".



                                    (Marcos Aguinis, en La Nación (Buenos Aires), 21/04/2012).





CUESTIONES


1.- Haga un comentario de texto del fragmento que se propone contestando a las preguntas siguientes:

a.- Enuncie el tema del texto (0,5 puntos).

b.- detalle sus características lingüísticas y estilísticas más sobresalientes (1,25 puntos).
c.- indique qué tipo de texto es (0,25 puntos).

2.- Redacte un resumen del contenido del texto (1 punto).

3.- Elabore un texto argumentativo a favor o en contra de la opinión de que aprender a leer sea uno de los acontecimientos más importantes de la vida (1,5 puntos).

4a.- Analice sintácticamente: Ellos sonrieron y pusieron delante de mi libros y periódicos que apoyaban esa revelación (1,5 puntos).

4b.- Explique el concepto de metáfora y el sentido metafórico de la siguiente expresión del texto: Devoré casi todas las maravillas de ese santuario (1 punto).

5.a. La novela y el cuento hispanoamericanos de la segunda mitad del siglo XX. Tendencias, autores y obras principales (2 puntos).

5.b. Comente los aspectos más relevantes de la obra del siglo XIX que haya leído en relación con su contexto histórico y literario (1 punto).

4º DE ESO: GÉNEROS PERIODÍSTICOS

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Para complementar la información dada en clase, aquí tenéis el enlace a un sencillo y útil cuadro general sobre los


EJEMPLOS DE GÉNEROS PERIODÍSTICOS:
GÉNERO DE OPINIÓN: EL EDITORIAL

DERECHOS EN PELIGRO

El uso de virus troyanos por parte de la policía plantea riesgos de intromisión en la intimidad

EL PAÍS, 5-6-2013

El borrador del anteproyecto del Código Procesal Penal elaborado por una comisión de expertos, por encargo del Ministerio de Justicia, contempla la posibilidad de que la policía puedan utilizar los llamados virus troyanos, es decir, programas informáticos que permiten penetrar en los ordenadores particulares o corporativos sin ser advertidos, para captar y transmitir información a ajenos. El acceso remoto a los equipos permite introducirse en ordenadores, tabletas, teléfonos móviles y sus conexiones en la nube y con otros equipos; y no solo posibilitará observar los contenidos de los discos duros, sino tener las claves de acceso a cualquier dispositivo digital, incluidas redes sociales o programas como Skype.
Desde el punto de vista técnico, la aplicación de este procedimiento podría equipararse a las actuales escuchas telefónicas que los jueces autorizan para seguir los pasos de presuntos delincuentes; pero a nadie se le oculta que, en el caso de los troyanos, el poder de intromisión en la intimidad de las personas es infinitamente mayor. Y el potencial intrusivo no solo abarca a los investigados, sino a cualquiera que se relacione con ellos digitalmente. Aunque un portavoz de Justicia ha aclarado que todavía no hay decisión tomada al respecto, algunos de los puntos del borrador resultan preocupantes. En particular, el hecho de que se proponga autorizar este procedimiento para investigar todo tipo de posibles delitos penados con más de tres años de prisión. Aunque los troyanos solo puedan utilizarse previa autorización judicial, permitir su uso de forma tan generalizada entraña enormes peligros y puede llegar a vulnerar derechos fundamentales. Así se ha entendido en Alemania, único país europeo que lo ha regulado. Después de que el Constitucional estableciera fuertes restricciones, allí se ha limitado su uso a delitos de terrorismo.
En el caso de España hay que tener en cuenta además que esta propuesta se inscribe en el marco de una reforma procesal de gran calado, en la que será el fiscal quien asuma la dirección de la instrucción en lugar de los jueces. Aunque persistirá el control del juez sobre la misma, no hay que olvidar que la jefatura de la fiscalía depende jerárquicamente del Gobierno. Cualquier regulación debería ser cuidadosamente debatida y, en todo caso, limitada a determinados delitos muy graves, con severas restricciones procedimentales y control judicial reforzado.

GÉNERO DE OPINIÓN: LA COLUMNA

EL GALLINERO

La distancia todo lo purifica, el tiempo es un lenitivo que expulsa del cerebro los recuerdos desagradables.

MANUEL VICENT, EL PAÍS, 26-5-2013

Para el científico, el artista, el empresario, el estudiante, que ha vivido una larga temporada en el extranjero, el regreso a la España actual constituye una prueba muy dura. Acostumbrado a un trabajo metódico y a una vida más bien tranquila, al volver a casa se encuentra inmerso en un agrio y frenético guirigay. El fuego cruzado de improperios que se lanzan los políticos desde cada bando se halla orquestado con la histeria agresiva de algunas tertulias de radio y televisión donde unos rostros congestionados, intercambiables, emiten opiniones compulsivas a cara de perro, con la yugular a punto de estallar. Si el recién llegado no pone de nuevo tierra por medio, deberá realizar un esfuerzo titánico para acomodar su vida al margen de este insoportable gallinero. Cuando trabajabas en Norteamérica en un laboratorio, empresa o universidad, en cualquier conversación entre paisanos siempre salía a relucir la tortilla de patatas o el chorizo del pueblo; si gracias a una beca Erasmus vivías en el norte de Europa y a las tres de la tarde ya era noche cerrada recordabas con nostalgia las mañanas soleadas de domingo en una terraza tomando unas cañas con los amigos; si eras cooperante en una ONG en África negra cualquier imagen de España, las fiestas, el ruido de los bares, te parecía un mundo irreal comparado con la miseria y el dolor que te rodeaba. La distancia todo lo purifica, el tiempo es un lenitivo que expulsa del cerebro los recuerdos desagradables. Pero desde lejos España no era solo la tortilla de patatas y el chorizo del pueblo, ni las playas soleadas, ni los paisajes, canciones y aromas de la niñez. Desde la distancia este país también era la solidaridad de la gente, la pasión de vivir, el impulso creativo de la libertad recién estrenada, la ilusión de que en el futuro todo iba ser mejor después de haber superado felizmente una siniestra dictadura, aquella izquierda dinámica que daba fundamento a la democracia, la austeridad natural de la economía anterior a la gran codicia. Hubo un momento en que parecía que este país había tomado, por fin, el pulso a la historia. ¿Qué ha pasado para que todo aquel espíritu se haya ido al carajo? Es lo que se pregunta el español que regresa a casa al encontrarse con este gallinero.






2º DE BACHILLERATO: SINONIMIA, ANTONIMIA, E HIPERONIMIA



Como ya hemos recordado en otras ocasiones, en la pregunta de morfología y semántica  de la PAU a veces se hace referencia a estos fenómenos semánticos. Un último repaso de los mismos puede resultar de utilidad.

SINONIMIA Y ANTONIMIA. HIPONIMIA

SINONIMIA

Cuando decimos que dos palabras son sinónimas nos estamos refiriendo a que entre ellas existe una relación de igualdad de significado, es decir, que ambas pueden ser empleadas para expresar una misma cosa. Por ejemplo, "mujer" y "esposa" se emplean en muchas ocasiones para decir lo mismo, al igual que "contento" y "feliz".

Podemos distinguir dos tipos de sinónimos:

-Sinónimos totales: son palabras que tienen el mismo significado en todos los contextos lingüísticos, como "micrón" y "micra", dejando aparte consideraciones terminológicas. Son comunes en el léxico científico.

-Sinónimos parciales: palabras que tienen el mismo significado en muchos contextos lingüísticos pero no en todos, como en el caso de coche y automóvil: así, podemos decir "Mi padre subió a un automóvil" o "Mi padre subió a un coche", pero aunque podemos decir "La locomotora arrastraba tres coches" no podemos decir "La locomotora arrastraba tres automóviles".

A veces el contexto determina el uso apropiado de un sinónimo u otro. Ese contexto puede ser a veces de tipo geográfico: utilizamos "papa" en América o "patata" en España. Otras veces el uso estilístico o literario resulta determinante: en el lenguaje poético es admisible "azur", pero no en el lenguaje estándar, donde "azul" sería el término elegido.

Una de las grandes utilidades de los sinónimos –además de permitirnos enriquecer nuestro mensaje- es que podemos emplear la expresión más adecuada a cada situación comunicativa. Por ejemplo, diríamos "ebrio en el registro culto; "borracho" en un contexto coloquial.


ANTONIMIA

Por el contrario, la antonimia es un tipo de relación semántica que se establece entre palabras que poseen significados totalmente contrarios, como bueno – malo; frío – calor, o alto – bajo.

Se pueden distinguir hasta tres tipos de antónimos:

-Los antónimos graduales son aquellos entre los que se puede establecer una gradación, como grande – pequeño, o bueno – malo. Aunque grande y pequeño son contrarios, entre ellos algo puede ser mediano, como entre bueno y malo puede ser regular.

-Los antónimos complementarios son aquellos entre los que no es posible establecer gradación alguna. Ocurre, por ejemplo, entre vivo – muerto, o entre sano – enfermo. O se está vivo, o se está muerto. O se está sano, o se está enfermo.

-Los antónimos recíprocos se dan en aquellos casos en los que la existencia de un término implica, forzosamente, la del otro: padre – hijo; comprar – vender, etcétera. Si alguien es padre, alguien tiene que ser hijo. Si alguien compra, alguien vende.


HIPONIMIA E HIPERONIMIA

Por otra parte, entre dos palabras se establece una relación de hiponimia cuando el significado de una de ellas –hipónimo- está incluido en el signficado de la otra –hiperónimo-. Por ejemplo, "margarita" es hipónimo de "flor", al igual que "amapola". Entre los términos que comparten un mismo hiperónimo –como "margarita" y "amapola" existe una relación de co-hiponimia.

Un hiperónimo  puede a su vez ser hipónimo de otro término mayor. "Flor", como hemos visto, es hiperónimo de "margarita" y "amapola", pero es también hipónimo de "vegetal", que a su vez es hipónimo de "ser vivo", etcétera.




viernes, 10 de mayo de 2013

4º DE ESO: LIBRO DE LECTURA: "ZARA Y EL LIBRERO DE BAGDAD"



Así comienza esta novela de Fernando Marías, galardonada con el Premio "Gran Angular" 2008 de la Editorial SM

"Es mentira que los muertos mueran cuando mueren. A veces les alarga la vida el amor.

En tales ocasiones, los muertos, tras morir, perviven en el corazón de quienes los amaron y los recuerdan, que se convierten así en espejo temporal de su memoria sobre la tierra, en eco emocional de sus espíritus, que rebota frágil y desesperanzado, pero vivo, contra las paredes de piedra del olvido.

Si fuiste amado, los latidos de tu corazón ya intangible se alargarán como sombras de caminante solitario que busca regresar a casa antes de que se cierna la noche.

Si amaste, vivirás. No para siempre, porque el ser humano es incompatible con la magnitud de esa palabra, pero sí más allá de tu propia muerte..

Serás un muerto que no haya muerto cuando haya muerto.

Pero, ¿y si nunca amaste? ¿Si caminaste sobre la tierra de puntillas, sin resuello y acobardado ante la idea del amor al acecho?

Dedico este libro a la memoria del viejo Max, que cuando yo termine de escribir tendrá toda la larga muerte por delante, y lo dedico también al futuro de la joven Zara, a quien aguarda una vida nueva ahí mismo, tras la esquina.

Max y Zara vinieron de la guerra, pero de guerras distintas acaecidas en tiempos distintos.

Max y Zara vinieron impulsados por el amor a la vida, pero eran formas de amor a la vida distintas, y puede que contradictorias.

Me crucé en su camino sin haber hecho nada por merecerlo. Pero la historia que vive junto a ellos, cuyos sucesos esenciales tuvieron lugar en poco más de veinticuatro horas, aunque también podría decirse que abarcaron casi todo el siglo xx y recorrieron el planeta de punta a punta, late en mi interior como si tuviera corazón propio, y siento la irrenunciable obligación de contarla."