JUAN RAMÓN JIMÉNEZ (1881-1958) |
En
el balcón, un instante
nos quedamos los dos solos.
Desde la dulce mañana
de aquel día, éramos novios.
—El paisaje soñoliento
dormía sus vagos tonos,
bajo el cielo gris y rosa
del crepúsculo de otoño.—
Le dije que iba a besarla;
bajó, serena, los ojos
y me ofreció sus mejillas,
como quien pierde un tesoro.
—Caían las hojas muertas,
en el jardín silencioso,
y en el aire erraba aún
un perfume de heliotropos.—
nos quedamos los dos solos.
Desde la dulce mañana
de aquel día, éramos novios.
—El paisaje soñoliento
dormía sus vagos tonos,
bajo el cielo gris y rosa
del crepúsculo de otoño.—
Le dije que iba a besarla;
bajó, serena, los ojos
y me ofreció sus mejillas,
como quien pierde un tesoro.
—Caían las hojas muertas,
en el jardín silencioso,
y en el aire erraba aún
un perfume de heliotropos.—
No
se atrevía a mirarme;
le dije que éramos novios,
...y las lágrimas rodaron
de sus ojos melancólicos.
le dije que éramos novios,
...y las lágrimas rodaron
de sus ojos melancólicos.
2. EL VIAJE DEFINITIVO
Y yo me iré. Y se quedarán los pájaros cantando;
y se quedará mi huerto con su verde árbol,
y con su pozo blanco.
Todas las tardes el cielo será azul y plácido;
y tocarán, como esta tarde están tocando,
las campanas del campanario.
Se morirán aquellos que me amaron;
y el pueblo se hará nuevo cada año;
y en el rincón de aquel mi huerto florido y encalado,
mi espíritu errará, nostálgico.
Y yo me iré; y estaré solo, sin hogar, sin árbol
verde, sin pozo blanco,
sin cielo azul y plácido...
Y se quedarán los pájaros cantando.
Y yo me iré. Y se quedarán los pájaros cantando;
y se quedará mi huerto con su verde árbol,
y con su pozo blanco.
Todas las tardes el cielo será azul y plácido;
y tocarán, como esta tarde están tocando,
las campanas del campanario.
Se morirán aquellos que me amaron;
y el pueblo se hará nuevo cada año;
y en el rincón de aquel mi huerto florido y encalado,
mi espíritu errará, nostálgico.
Y yo me iré; y estaré solo, sin hogar, sin árbol
verde, sin pozo blanco,
sin cielo azul y plácido...
Y se quedarán los pájaros cantando.
Elejía, 1907-1908
3. AGUA HONDA Y DORMIDA
Agua honda y dormida, que no
quieres ninguna
gloria,
que has desdeñado ser fiesta y catarata;
que,
cuando te acarician los ojos de la luna,
te llenas
toda de pensamientos de plata ...
Agua limpia y callada del
remanso doliente,
que has
despreciado el brillo del triunfo sonoro;
que,
cuando te penetra el sol dulce y caliente,
te llenas
toda de pensamientos de oro ...
Bella y profunda eres, lo mismo
que mi alma;
a tu paz
han venido a pensar los dolores,
Y brotan,
en las plácidas orillas de tu calma,
los más
puros ejemplos de alas y de flores.
La soledad
sonora, 1908
4. Eternidades
Vino primero pura,
vestida de inocencia;
y la amé como un niño.
Luego se fue vistiendo
de no sé qué ropajes;
y la fui odiando sin saberlo.
Llegó a ser una reina
fastuosa de tesoros...
¡Qué iracundia de yel y sin sentido!
Más se fue desnudando
y yo le sonreía.
Se quedó con la túnica
de su inocencia antigua.
Creí de nuevo en ella.
Y se quitó la túnica
y apareció desnuda toda.
¡Oh pasión de mi vida, poesía
desnuda, mía para siempre!
Vino primero pura,
vestida de inocencia;
y la amé como un niño.
Luego se fue vistiendo
de no sé qué ropajes;
y la fui odiando sin saberlo.
Llegó a ser una reina
fastuosa de tesoros...
¡Qué iracundia de yel y sin sentido!
Más se fue desnudando
y yo le sonreía.
Se quedó con la túnica
de su inocencia antigua.
Creí de nuevo en ella.
Y se quitó la túnica
y apareció desnuda toda.
¡Oh pasión de mi vida, poesía
desnuda, mía para siempre!
Diario de
un poeta recién casado, 1916
5. ESPACIO (fragmento), 1941)
Los dioses no tuvieron más sustancia
que la que yo tengo. Yo tengo, como ellos,
la sustancia de todo lo vivido
y de todo lo por vivir. No soy presente sólo,
sino fuga raudal de cabo a fin. Y lo que veo
a un lado y a otro, en esta fuga,
rosas, restos de alas, sombra y luz,
es sólo mío,
recuerdo y ansias míos, presentimiento, olvido.
que la que yo tengo. Yo tengo, como ellos,
la sustancia de todo lo vivido
y de todo lo por vivir. No soy presente sólo,
sino fuga raudal de cabo a fin. Y lo que veo
a un lado y a otro, en esta fuga,
rosas, restos de alas, sombra y luz,
es sólo mío,
recuerdo y ansias míos, presentimiento, olvido.
POÉTICA: Juan
Ramón Jiménez representa perfectamente al poeta dedicado en cuerpo y alma a su labor
artística. Más allá de la creación literaria no existe nada. Eso
explica que su vida se defina por el aislamiento de los demás. *
El pensamiento poético de JRJ se condensa en tres ideas fundamentales, sin
las cuales es difícil entender su obra:
a. Su poesía es una poesía minoritaria (“A la minoría,
siempre” es una famosa dedicatoria suya), de dificultad creciente. Es poesía
difícil, hermética.
b. JRJ consideró su obra
poética siempre en constante creación, "obra en marcha"de ahí que continuamente vuelva sobre los
poemas antiguos para cambiarlos, retocarlos o eliminarlos.
c. La poesía de JRJ encarna una triple aspiración: de
belleza, de conocimiento y de eternidad. La poesía representa la
Belleza, la Perfección, al mismo Dios, que se identifica con la Naturaleza o
con la Belleza absoluta o, incluso, con el propio poeta creador.
*Aislamiento del que se acusado a JRJ, pero que no se corresponde con la realidad: antes y después de su exilio en 1936 fue un intelectual comprometido con la causa republicana, de la que nunca desertó. Su bra "Guerra en España" es un testimonio fiel de ese compromiso
*Aislamiento del que se acusado a JRJ, pero que no se corresponde con la realidad: antes y después de su exilio en 1936 fue un intelectual comprometido con la causa republicana, de la que nunca desertó. Su bra "Guerra en España" es un testimonio fiel de ese compromiso
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